Una de nuestras especialidades culinarias y de referencia, es la paletilla de cordero. Cocinada a baja temperatura durante muchas horas y un horneado dorado, a nuestro estilo. Elaboradas con muuucho tiempo, paciencia y cariño; como antaño. 

La paletilla de cordero con receta propia de antiguo de la familia adaptada a las nuevas técnicas de trabajo, es de esos platos que siempre están en la carta.

El cordero que pasta por estos Valles o el Ternasco de Aragón I.G.P. son las variedades con las que se elaboran los platos. Se indica en la preparación qué tipo es el utilizado.

Maridaje: Bien podria pasar por hacerlo con un Vino Tinto con Crianza y para los más atrevidos, un Blanco no afrutado o un Cava.

      

 

La elaboración de nuestro cochinillo es a conciencia. Deshuesando y moldeando a mano. Dándole horas al horno. Despacio y con calma, para que el resultado final sea sorprendentemente jugoso y crujiente. De ahí que sea tambien un plato estrella y de referencia de La Cocinilla.

Para degustarlo; dejando que cada porción llevada a la boca la invada. Es un plato delicado que merece ser saboreado cerrando los ojos.

Maridaje: Acompañándolo de un buen Vino Blanco con cierta acidez, un Tinto con madera o un Cava.

  

Nuestra Terrina de Foie es la definición de delicadeza para el paladar. Hecha en casa, con los mejores productos e ingredientes. Una vez llevada a la boca es donde se aprecia ciertamente y que "delicadeza",es la mejor deficinición.

Maridaje: Un buen maridaje de la Terrina podría ser acomapañarla de un Vino Blanco refrescante y con toques cítricos y/o manzana verde,  incluso con aguja o un Tinto no afrutado.

  

Los caracoles a la brasa de La Cocinilla vienen de los Monegros de Huesca y son autóctonos. Antes de llegar a la mesa con la receta propia de La Casa, pasan por un proceso de crianza y ayuno previo que realiza el productor y de un triple lavado y revisión uno a uno en nuestras instalaciones.

¿Y porqué caracoles "El Boliche" si su precio es más alto?. ¿Tanto se nota?.  El caracol de Monegros nos da la tranquilidad de saber que ha sido alimentado con productos naturales, ecológicos y sometido a controles estrictos sanitarios.  Además, los caracoles de Monegros, son de un tamaño homogéneo y la cáscara no se rompe con facilidad.

Maridaje: El caracol puede permitir algo más de cuerpo en los caldos. Vinos más complejos, con más tiempo en barrica y botella. 

     

Para los amantes de este tipo de carnes, elaboramos las mismas de tal forma que al paladar resulten suaves, sabrosas y jugosas.

El jabalí, el ciervo, la perdiz...entre otras, son presentadas al plato dándoles el valor que tienen y merecen.

Maridale: Los platos más "gruesos" de caza, soportan bien los Vinos también "gruesos". Tintos con mucha Crianza y/o Reserva, de largo tiempo en madera y en botella. 

    

En auténtico hogar de leña, las brasas de roble y encina y a la vista del viajero; carnes, pescados, verduras y caracoles se cocinan como en el inicio de los tiempos.

Si al mejor producto le añadimos los matices de aromas y sabores que le aportan las brasas de leña, tendremos en el plato lo mejor de lo mejor, satisfaciendo a quienes aman estas formas mil milenarias de cocinar.

  

    

    

  

    

Todos nuestros postres se elaboran en Casa. Es nuestro empeño hacerlo así pues un buen postre casero puede ser el colofón final de una gran velada. 

Desde la elección de la calidad de los ingredientes, pasando por la elaboración, horneado y emplatado, pasa mucho tiempo e implica mucho trabajo, aunque sobre todo conlleva satisfacción por el resultado.